“Last Night in Soho” (2021)
Después de buscar mucho, finalmente encontré un cine cercano que, en medio de una selección de películas populares como “Dune”, “Eternals” y “James Bond”, había reservado una sala para “Last Night in Soho”. Después de ver la película, tengo que decir que me ha dejado aún más frustrado por la falta de atención que recibió.
“Last Night in Soho” es una de las mejores películas del año y mi favorita de 2021. No solo es impresionante en todos los aspectos técnicos, sino que también es fresca y otra obra maestra del cine de Edgar Wright, quien, en mi opinión, nunca ha hecho una mala película.
La mirada y el estilo de contar historias únicos de Wright dan vida a sus películas a través de la cámara, la cinematografía, la edición y el sonido.
La forma en que estos elementos trabajan juntos de manera simbiótica es realmente notable y da como resultado algo que ningún elemento por sí solo podría lograr.
La habilidad de Wright para seleccionar el talento adecuado para rodearlo detrás y delante de la cámara también es impresionante. Para “Last Night in Soho”, tomó la genial decisión de trabajar con Jeong Jeong-hun, quien aportó su propia marca de cinematografía que se ajustó perfectamente al proyecto. La iluminación y la atmósfera creadas por Jeong-hun para diferenciar entre los “sueños” y la realidad son sutiles pero efectivas.
Wright usó su equipo habitual en la mayoría de las otras áreas por una buena razón. Marcus Rowland ha trabajado en seis de las películas de Wright como diseñador de producción y ofrece su mejor trabajo en “Last Night in Soho”. Los escenarios son orgánicos y se vuelven más impresionantes a medida que avanza la película.
La edición de Paul Machliss también es esencial para la película, con su trabajo en “Baby Driver” demostrando su talento. Junto con Steven Price, quien compuso la música para ambas películas, este equipo de alto poder utiliza cortes rápidos en sincronización con la música para crear una tensión única en estas películas.
El talento frente a la cámara también es impresionante. Aunque la voz de Thomasin McKenzie no me convenció al principio de la película, finalmente toma el control de cada escena, lo que encaja perfectamente con el desarrollo de su personaje. Anya Taylor-Joy demanda nuestra atención desde el principio y muestra un rango en la película que es verdaderamente impresionante, incluso cantando. Además, el resto del reparto, incluidos Diana Rigg, Matt Smith y Terence Stamp, hicieron un gran trabajo.
El único defecto menor que noté fue que en algunas escenas con Michael Ajao y Thomasin McKenzie, parecían competir por ver quién podía hablar más bajo.
En general, “Last Night in Soho” es una película fantástica que debe verse. El giro al final es excelente y hace que el final sea poderoso y empoderador.
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