We Live in Time
Pensé que sabía qué esperar de esta película, pero nada me preparó para lo profundamente que me iba a afectar. Al final, estaba hecho un desastre emocional, y, incluso horas después, todavía siento su impacto.
Es una película poderosa con una historia que golpea como una tonelada de ladrillos. Por eso creo que el mayor error fue no contarla de manera lineal. La forma en que comienza revela tanto que pienso que habría sido mucho más impactante si hubiéramos experimentado el viaje junto a los personajes, descubriendo las cosas a medida que ellos lo hacen.
Aun así, a medida que avanza la película, te encuentras perdonando sus fallos cada vez más. Gran parte de esto se debe a las increíbles actuaciones de Andrew Garfield y Florence Pugh. Aunque al principio parecen un poco desentonados, pronto te das cuenta de por qué. A medida que conoces a estos personajes, su incomodidad e imperfecciones se convierten en un testimonio de un guion brillantemente escrito, traído a la vida por dos actores que te hacen sentir como si estuvieras siguiendo a personas reales. Sus emociones crudas tiran de tu corazón y lo rompen en pedazos.
John Crowley también merece un gran reconocimiento. Deja que la historia se desarrolle sin forzar momentos emocionales. En lugar de golpearnos con un solo gran momento emotivo, permite que ola tras ola de sentimientos nos inunde, acumulando el impulso hasta que estás completamente abrumado. Nada, desde los altibajos hasta el hermoso diálogo, se siente forzado o fuera de lugar.
Me encantó esta película. Sí, me hubiera gustado que la edición fuera diferente, pero aun así me siento afortunado de haber presenciado una historia de amor tan pura. Se sintió tan real que me hizo reír, me llenó de orgullo e inspiración, y más de una vez, me hizo llorar a mares. Al final, solo quería irme a casa y decirle a todos los que amo cuánto significan para mí. Me hizo darme cuenta de lo fácil que lo tenemos la mayoría de nosotros y cómo a menudo damos eso por sentado.
Para finalizar, amamos a Andrew Garfield, y esta película nos da otra razón para hacerlo. Pero, sin duda, esta es la película de Florence Pugh. Ella tiene una cualidad indescriptible, dando su corazón y alma a cada papel que interpreta. Solo por eso, merece todos los elogios. Para cualquiera que vio el tráiler y pensó que la química entre los dos no estaba allí, vean la película. Lo entenderán. Especialmente si alguna vez has pasado por algo así, verás cuán real se siente su conexión.
¿Qué película te ha hecho llorar a mares?